VALLE DE BOI Y AIGUESTORTES
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En el punto de encuentro nos encontramos un numeroso grupo de participantes para ir a visitar el Parque Nacional de Aiguestortes. La caravana de más de 10 coches atraviesa el Túnel de Vielha dirigiéndonos hasta el Valle de Boí. En el aparcamiento de La Farga nos recogen los taxis evitándonos, en primer lugar, la dificultad de aparcar en el pueblo de Boí, en segundo lugar, las colas para coger los taxis, en estas fechas,muy largas.
Iniciamos el recorrido a pie por la parte del parque que le da el nombre: el Planell d'Aiguestortes. El paseo por la plataforma de madera, adaptada para discapacitados, nos posibilitó ir conociendo aspectos de la geología del Pirineo y, más concretamente, del Parque. Hablamos y comentamos sobre las orogénesis hercinianana y la alpina, de las glaciaciones, la erosión y de todo aquello que contribuyó a modelar las montañas del Pirineo. Comentamos los diferentes tipos de lagos y la sedimentación ejercida en ellos. Descubrimos la flora que habita en los diferentes pisos (subalpino, alpino y nival). En definitiva, íbamos interpretando lo que íbamos viendo en la montaña.
Los que habían acudido a la excursión del lunes explicaron las enseñanzas aprendidas como a diferenciar entre un pino negro y un abeto, a medir un árbol, etc.
Los más ansiosos de marcha dirigieron sus pasos hacia el Estany Llongy, salvándose, entre otras cosas, de mis largas explicaciones.
Unos pocos tomaron los taxis para comer en el valle de Boí. Los 17 que quedamos descendimos desde el Planell hasta el estany de Llebreta por un sendero, siguiendo el cauce del río Sant Nicolau, disfrutamos de la comida en un rincón, protegiéndonos del viento, junto a un abeto milenario y al arrullo de una cascada, admiramos la cascada del Sant Esprit y nos maravillamos del "estany" de Llebreta en su orilla.
Vimos y admiramos Sant Climent y Santa María de Taull, de los mejores ejemplares del románico español.
Sant Climent fue consagrada el 10 de diciembre de 1123. Su planta de basílica perfecta con tres naves contrasta bastante con la techumbre de madera, construcción ya pasada de moda y sustituida en la época por la bóveda de piedra. Esto podría considerarse como un hecho anacrónico. Por otro lado, la decoración lombarda del exterior sitúa a la iglesia en una modernidad que se había extendido ya por las regiones italianas de Mantua y Verona.
Sta. María se encuentra a pocos metros de la iglesia de Sant Climent que pertenece a la misma época. Las dos fueron erigidas al mismo tiempo siendo consagrada la de Santa María dos días más tarde que la de San Clemente en el año 1123. Durante todo el siglo XVIII fue la única parroquia del municipio de Taüll.
El 30 de noviembre de 2000 la UNESCO declaró al conjunto románico de la Vall de Boí Patrimonio de la Humanidad, si bien desde la organización se manifestó el deseo de que en el futuro las pinturas y mobiliario originales de las diversas iglesias fueran devueltas por el MNAC.
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