BASSA D’OLES a MAIR DE DIU DES NHEUS
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Partimos con nuestros coches desde Vielha, hasta el pueblo de Gausac. Desde este pueblo seguimos las indicaciones de los carteles a la Bassa d’ Oles. La carretera es una pista forestal asfaltada, en muy buenas condiciones, estrecha pero bonita entre bosque de pino silvestre y abetos.
Si en Vielha hacía frío, en la Bassa d'Oles mucho más,6ºC y con viento, lo que hacía que la sensación de frío fuera mayor.
Después de abrigarnos, tomamos el sendero que parte detrás del refugio. Lo seguiremos a pie en ligera subida, superaremos un escalón y nos encontramos con los restos de una pequeña laguna.
Prados, bordas, caballos y sobre nosotros, a la izquierda, el Montcorbison, hoy con niebla en la cima, una montaña que, aún no siendo muy elevada, tiene una situación privilegiada por su situación. Llegamos a dos pequeñas cabañas de pastores y un abrevadero donde hacemos una parada para recuperar fuerzas. Los benjamines de la excursión, Irene y Daniel, de dos años, se toman sus respectivos yogures. David ha llegado hasta este punto completamente dormido en la silla-mochila. Irene, sin embargo, ha protestado bastante. Desde este punto Alejandro, así le gusta que le llamen, según me cuenta el, se convierte en mi "ayudante" siempre a mi lado. Su hermano Andreu con su padre recibe el apodo de "gamo".
Un poco más adelante, debajo de la Ròca de Sacosta (1859m), las vistas sobre el valle son tan bellas como impresionantes. El sendero va a media ladera entre prados con fuerte pendiente, a nuestra izquierda tenemos el Tuc dera Entecada (2267m), nos adentramos en un bosque de hayas precioso, haciéndolo más hermoso la niebla. Al salir del bosque tendemos ante nosotros un sobrecogedor paisaje rodeado de montañas, el barranco de Geles deja caer el agua bruscamente. Hemos llegado a Eth Santet dedicado a Era Mair de Diu de Nheus. Una manada de caballos nos vienen a dar la bienvenida esperando algo de comida por nuestra parte, no les damos para que no nos den la paliza. Unas mesas con bancos nos invitan a comer, por supuesto, nuestro picnic. Después de la comida y sin un merecido reposo por la amenaza de lluvia, continuamos camino, ahora por pista forestal, parte desde una fuente con dos caños, y durante dos kilómetros, en una curva a la izquierda tomamos el camino, en ligera subida, siempre por dentro de bosque de abetos, poco antes de salir del bosque admiramos un gigantesco hormiguero. Salimos a unos prados y nos encontrarnos con una cabaña y un abrevadero, desde aquí divisaremos la pequeña laguna que pasamos al iniciar el itinerario y llegar a hasta nuestros coches.
Hoy no hay fotos, no me acorde de alimentar la batería de la cámara.
Comentarios
Somos Alejandro, (tu secretario) y Andreu, (la gacela de los pirineos), y queremos decirte que nos gustaron mucho las excursiones que hizimos contigo, ya que aprendimos mucho y nos lo pasamos muy bien. Mi padre(el fotografo) hizo unas fotos muy bonitas de la Bassa d'Oles, ¿quieres que te las enviemos?.
Saludos,
El secretario, la gacela de los pirineos y familia.